Los profetas entendían claramente que hablaban en nombre de Dios, y así corrientemente introducían sus mensajes con expresiones como:
"Jehová dijo así" (Isaias 66:1).
"Palabra que vino de Jehová a Jeremías" (Jeremías 11:1).
"Visión de Isaías hijo de Amoz" (Isaias 1:1).
"Miré, y he aquí" (Ezequiel 10:1; Apocalipsis 4:1).
"Y vi" (Apocalipsis 5:1).